Hay ideas que nos acompañan toda la vida. En mi caso, Mis Margaritas nació como una inquietud dentro de mi núcleo familiar: cómo acompañar mejor a las personas mayores, y cómo ofrecer un entorno donde se sientan cuidadas, escuchadas y valoradas. Luego de una extensa trayectoria como médico neurólogo, atendiendo en mayoría a adultos mayores, esa convicción se fue transformando en una necesidad concreta. Hoy, ese proyecto toma forma junto a Mabel, una profesional con una sólida formación en gerontología y una vasta experiencia en el cuidado integral de personas mayores. Al igual que yo, Mabel siempre tuvo esta idea como un deseo personal, nacida del compromiso profundo con el bienestar de quienes atraviesan esta etapa de la vida. Juntos estamos construyendo un espacio de excelencia, con una mirada centrada en el bienestar físico, emocional y social. Un lugar pensado con criterio médico, pero sobre todo con compromiso ético y humano. La medicina me enseñó que acompañar también es cuidar. Mis Margaritas surge desde ese compromiso, con la intención de brindar una alternativa real y cálida para quienes necesitan ser acompañados en esta etapa de la vida.